Evolución Monetaria en Honduras: Como pasamos del trueque al uso de monedas.

Como es bien sabido, la evolución en el uso de monedas, billetes y medios de pago simbolizan y dan cuenta de una serie de procesos sociales, económicos y políticos que definen a un país en sí. Por supuesto que nuestra amada Honduras también ha pasado por esos cambios y no siempre el Lempira fue la moneda nacional y la de mayor uso en todo el país, en tener todos los billetes y monedas que actualmente se encuentran en circulación corresponde a toda una evolución económica que tuvo sus inicios desde el primer instante en que los españoles pisaron el territorio catracho.

Según cuentan algunos historiadores sobre los inicios económicos de Honduras, nuestros primeros aborígenes no utilizaban monedas como tales para poder adquirir algún tipo de bien o servicio en específico sino que para esto ellos realizaban algo a lo que se le llamaba Trueque, algo que consistía básicamente en el intercambio de un producto por otro producto. De esta forma fue que nuestros antepasados empezaron a usar el cacao o las plumas como una forma de moneda que intercambiar por algún producto o servicio, ejerciendo así una primitiva forma de comercio.

El Trueque como primero forma de economía.

El Lempira como moneda nacional.

Las monedas se acuñaban en el país hermano de Guatemala y todas las reservas que salían de nuestras minas iban a parar a aquel país. Así es como se registra el acuñó de la primer moneda en Honduras y está data del año 1,733 más específicamente. Ahora, al hablar del billete como dinero, este se empezó a expandir cuando Honduras finalmente se libra de la posesión española aproximadamente para el año 1880 cuando el prócer Marco Aurelio Soto determinó la acuñación de monedas de plata y finalmente en un gobierno posterior se consideró y ordeno la acuñación de monedas de oro.

Fue ya después de 105 años de que Honduras se hubiera independizado de la nación española que se consideró el debate acerca de que nombre llevaría la moneda oficial de Honduras, esto se llevó a cabo en el Congreso Nacional. Finalmente se decidió que se llamaría Lempira y no Morazán como también se había propuesto, lo que generó algo de conflicto. Ahora venía el reto de diseño del billete y esto también representaba un conflicto pero finalmente se llego a una conclusión que fue evolucionando hasta el diseño que conocemos hoy en día, emitiéndose el primer billete de Lempira en el año de 1951.

¿Ya conocías esta interesante historia? Déjanos saber tu opinión en la sección de comentarios. Te invitamos a leer nuestro artículo sobre General Francisco Morazán.